El sumo pontífice declaró en su tradicional discurso de inicio de año en el Vaticano que la vida del “niño no nacido” debe ser respetada y “no puede ser suprimida ni convertirse en producto comercial”.
El Papa Francisco rechazó rotundamente la maternidad subrogada y la categorizó como “deplorable”. Asimismo, pidió su prohibición universal a la “Comunidad Internacional” y justificó que la medida “se basa en la explotación de la situación de necesidad material de la madre».
Al tiempo, el pontífice habló sobre la “teoría de género” como una “colonización ideológica”que resulta «extremadamente peligrosa porque borra las diferencias en su pretensión de igualar a todos».
Además, enfatizó: “se han producido en las últimas décadas de introducir nuevos derechos, no del todo compatibles respecto a los definidos originalmente y no siempre aceptables”.
En su discurso al Cuerpo Diplomático, donde 184 representantes de Estados vinculados a la Santa Sede se hicieron presentes, Francisco expresó: «Tales colonizaciones ideológicas provocan heridas y divisiones entre los Estados, en lugar de favorecer la construcción de la paz».
De esta manera, el Papa se pronunció en contra de la maternidad subrogada al considerarlo una “explotación comercial de la vida”, la “teoría de género” y también llamó a las naciones a reflexionar sobre la aplicación práctica de la inteligencia artificial en la vida diaria.
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